Aproximadamente para una tarta de 22-24 cm de diámetro.
Tiempo de preparación: 10 minutos (+30 minutos de reposo)
Dificultad: ⭐ (Fácil)
La pâte brisée es una masa clásica de la pastelería francesa, perfecta para tartas saladas y dulces. Su textura es friable y ligeramente crujiente, lo que la hace ideal para quiches, tartas de frutas o cualquier preparación que necesite una base firme pero delicada. En esta receta te enseño cómo prepararla con una técnica sencilla y efectiva.
El nombre «brisée» proviene del francés y significa «rota» o «quebrada», haciendo referencia a su textura quebradiza una vez horneada. Esta masa se diferencia de la pâte sablée por su menor cantidad de grasa y su textura más firme, lo que la hace una opción ideal para bases de tartas que deben soportar rellenos más húmedos.
Materiales necesarios
- Bol grande
- Rodillo
- Cuchillo o cortador de masa
- Film transparente
- Molde para tarta
Ingredientes
- 250 g de harina
- 150 g de mantequilla fría en cubos
- 20 g de yemas de huevo (aproximadamente 1 yema grande)
- 15 g de azúcar (solo si se usa para una receta dulce)
- 5 g de sal
- 50 g de leche entera fría
Procedimiento
- Preparar los ingredientes: Corta la mantequilla en cubos pequeños y mantenla fría hasta el momento de usarla.
- Mezclar la harina y la mantequilla: En un bol grande, coloca la harina y la mantequilla. Con las manos o con un cortador de masa, trabaja la mezcla hasta obtener una textura arenosa.
- Añadir los ingredientes líquidos: Agrega las yemas de huevo, la sal y el azúcar (si la receta es dulce). Incorpora la leche fría poco a poco y mezcla hasta que la masa se una.
- Formar la masa: Amasa ligeramente solo hasta que los ingredientes estén integrados. No sobretrabajes la masa para evitar que se vuelva elástica.
- Reposo: Forma un disco con la masa, envuélvelo en film transparente y refrigera por al menos 30 minutos o hasta 24 horas sin problema. Si estás apurado, puedes meterla en el congelador por 10 minutos antes de usarla. Esto ayudará a que la mantequilla se endurezca y la masa sea más fácil de manipular.
- Estirar y usar: Sobre una superficie ligeramente enharinada, estira la masa con un rodillo hasta alcanzar el tamaño deseado. Coloca en el molde y refrigera nuevamente por 15 minutos antes de hornear.
Tips para el éxito
- Usa mantequilla bien fría para lograr una textura más quebradiza.
- No amases demasiado la masa, ya que el gluten se desarrollará y hará que la masa quede dura.
- Si hace calor, refrigera los utensilios antes de usarlos para evitar que la mantequilla se derrita rápidamente.
Usos de la receta
- Quiches y tartas saladas: Perfecta para quiche lorraine, quiche de ajoporro, tartas de verduras o preparaciones con queso.
- Tartas dulces: Si se añade azúcar, es ideal para tartas de frutas como tarta de manzana o de fresas.
Variaciones y sustituciones
- Puedes sustituir la leche por agua si deseas una masa más ligera.
- Para una versión más crujiente, puedes reemplazar una parte de la harina con harina de almendras.
- Si prefieres una opción más saludable, prueba con harina integral en lugar de harina blanca.
Conservación y almacenamiento
- La masa se puede refrigerar hasta 3 días envuelta en film transparente.
- Se puede congelar hasta 2 meses. Para usarla, descongela en la nevera durante varias horas antes de estirar y hornear.
¡Espero que esta receta te ayude a preparar tartas deliciosas! Si la pruebas, cuéntame en los comentarios cómo te fue o si tienes alguna duda.

